jueves, 21 de octubre de 2021

Cuestion de Actitud ...

 

Por Elsie Betancourt

            Todos sabemos que las canas, las arrugas, la forma física y otras arandelas han sido tradicionalmente interpretadas como signos de “distinción”  en los hombres más que en las mujeres. Las canas supuestamente hacen al hombre más atractivo e interesante, como si el hecho de tenerlas sea sinónimo de inteligencia… pero bueno…. Qué pasará con los calvos?  Con la mujer, la “vaina” es distinta. La tiranía de la juventud, desconoce que las mujeres de más de 50 y 60 años, con canas, arrugas, gorditos, manchas, siguen teniendo vida y aspiraciones de muchos tipos. A mí en particular, las canas no me gustan por eso me las pinto…  Menos mal que el prejuicio por la edad es uno de los últimos sesgos de nuestra cultura y está íntimamente ligado al sexismo;  éste se ha quedado (ese sesgo) viejo,  decrépito y camina poco a poco hacia la extinción.

            La palabra viejo o vieja tiene connotaciones distintas…. Quien no recuerda a Piero con “viejo, mi querido viejo… ahora ya caminas lento.”  Preciosa esa palabra viejo… ¿o no? Hay otras que no son tan lindas, por ejemplo cuando se aplica a los ancianos (que para allá vamos todos) y se  relegan al cuarto del olvido, porque pueden estar enfermos y/o ausentes mentalmente… un amigo me compartió un bello poema de Luis Correa: Nos llegó la tarde…”  su autor afirma ahí que  “Viejo es el mar y se agiganta…. Vieja es la Luna y nos alumbra….. Viejo es el amor y nos alienta…”. Lo recomiendo.



            Pienso que ahora los mayores, en especial las mujeres  son cada vez menos invisibles. Están recuperando el lugar que siempre debieron tener en la vida pública y en otros espacios.  Creo que no hay que “echar las campanas al vuelo”, porque el proceso está en curso y va lento…. Actualmente aparecen por ejemplo, mujeres mayores en altos cargos de política, algo impensable hasta hace poco, aunque raramente pasan de los 70 años. En cine por ejemplo,  hay pocos papeles de actrices mayores como protagonistas. El tener el  factor CAF (canas, arrugas, flacidez), no es algo que atraiga a los cineastas, a los políticos, a grandes empresarios,  para promover el protagonismo femenino, (aunque la cosa está cambiando).  En los anuncios, las y los mayores sólo aparecen haciendo publicidad de gel para prótesis de dentaduras, pañales para contención urinaria, sopas y medicinas para achaques. Ahora hasta las mujeres entradas en carnes y mayorcitas, son las modelos…el tiempo lo cambia todo. Creo que la experiencia que se acumula (llamada en forma despectiva vejez),  siempre marcará una valiosa diferencia, en cualquier ámbito.

            Personalmente pienso que la llegada a los 60, 70, 80,  hace que tanto hombres como mujeres se cuiden por gusto propio, para sentirse bien no para ser Cuchibarbies,  error en el que muchas y muchos caen… creo que la vejez hay que asumirla de la mejor manera, porque de esa manera se empodera la experiencia.  Los años deben ser una señal de bienestar de plenitud y no de decadencia.

             Para mí, hay cosas que mantienen joven el espíritu entre otras: 1.- Gozar a los nietos (si se tienen, o si no, a la mascota): Mis 6 nietos me hacen sentir realizada y  llena de la energía que transmiten; me recuerdan constantemente cuando mis 3 hijos estaban pequeños y fueron creciendo con todas las experiencias enriquecedoras vividas con ellos;  2.-la actividad física, llámese caminar, practicar algún deporte, hacer ejercicios;  3.-hacer cosas novedosas cada día, asistir a actividades de corte intelectual y recreativas…. 4.- Tener amigas: Cuando el tiempo pasa, la vida vuela, los hijos crecen, los trabajos van y vienen,  las amigas o hermanas,  son las que estarán al alcance siempre.

              Por todo lo anterior, necesitamos crear un sello que rompa la invisibilidad de los y las mayores de hoy porque irremediablemente el tiempo no se para, pero la intensidad de cómo se vive cada minuto, dicen los entendidos, es sólo una cuestión de actitud.

nerea6@yahoo.com

4 comentarios:

  1. Este es un artículo para reflexionar, para aceptarnos como somos y para qué la sociedad no estigmatice a los mayores, por que de una u otra forma hemos aportado a este sociedad. El entrar en nuestros años maduros no es señal de vejez, así es amiga Elsie Betancur.. Te felicito por tan excelente aporte a nosotros los mayores.

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  2. Muy bien dicho Azeneth… bns dias…viejo es el sol y nos alumbra, te recomiendo busques en YouTube el poema Nos llego la tarde …. P q disfrutes de una realidad que ya estamos viviendo y que inexorablemente todos viviran. Quedo atenta para salir con Alba y contigo… dime q fecha es buena y grcs por leerlo…

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  3. Hola Elbe.....tus reflexiones, con fina ironía por el trato que hoy día nos asiste, son bien fundadas....los patrones de medición han cambiado, antes los mayores quizás estaban, quizás porque duraban menos y no se les notaba tanto el trajín de la vida, mejor posicionados. Hoy, conductas como el culto al cuerpo y a la juventud, descalifican a los mayores tanto que ni en lo laboral, a pesar de la experiencia, los contemplan para el trabajo. La actitud que predicas es la que esta en el texto por el desenfado con que asumes el tema. Es como un memorando de respuesta a la vida, hecho con dignidad y corazón. Los nietos son como la cereza del pastel y la única responsabilidad que tenemos es amarlos si medida. Leer, escribir, mirar buen cine y escuchar fados (oigo de todo) son parte de mi rutina y eso me da años. Hay unas descripciones sublimes sobre el hecho de envejecer en las Memorias de Adriano de M. Yourcenar. Me estoy debiendo el caminao en la parte física. Como siempre, un abrazo niña Elbe.

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    1. Hola querido Jairo, me encantó tu gran reflexion, como siempre muy profunda. Ciertamente nuestra normalidad es otra, como bien dices. Cabria decir que todo tiempo pasado fue mejor, no se... lo que si veo es que la invisibilidad de los mayores se está reduciendo. Afortunadamente. E Esas cerezitas como las llamas tu, son las pildoritas que lo llenan a uno de buena energia. Voy a buscar lo que M. Yourcenar escribe sobre envejecer... que digo¡ explorar la juventud de la vejez...abrazos y gracias por leer el articulo.

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